Oh, espárragos blancos de Navarra,
tesoro de la primavera en tu tierra,
con tu sabor delicado y exquisito,
eres el orgullo de tu región y su tesoro más bonito.
Tus tallos son suaves y cremosos,
y tu textura tierna y jugosa nos maravilla,
cocidos a la perfección, con un toque de sal y aceite,
tu sabor es simplemente divino, nunca se olvida.
Tu color blanco como la nieve,
refleja la pureza y la belleza de tu origen,
y en cada bocado, nos llevas de viaje,
a las llanuras de la Ribera, tu hogar y tu origen.
Oh, espárragos blancos de Navarra,
eres un verdadero regalo de la naturaleza,
y cada año, esperamos ansiosamente tu llegada,
para deleitarnos con tu sabor y tu belleza.