Se dice que, hace algunos años, la mayoría de la gente en los pueblos no podía permitirse las alubias con guarnición completa. Sin embargo, una de las pocas personas que sí podía permitirse un plato de este nivel era el cura del pueblo. De ahí viene la expresión «con todos los sacramentos».
Ingredientes (4 personas):
300 g de alubias pintas •
200 g de costilla de cerdo •
100 g de tocino •
4 chorizos •
1 morcilla •
1 pimiento verde •
1 zanahoria •
1 cebolla dulce •
1 puerro •
aceite de oliva •
sal •
Elaboración:
Se ponen en remojo las alubias la víspera.
Cocemos la costilla y el tocino con agua y una pizca de sal durante media hora aproximadamente.
Escurrimos y reservamos.
Ponemos a cocer a fuego suave la morcilla y los chorizos con agua y una pizca de sal durante 40 minutos aproximadamente
Pica la cebolla finita, el pimiento verde y el puerro Corta la zanahoria en rodajas.
Lavamos bien las alubias y escurrimos, en un puchero ponemos las alubias junto con todos los ingredientes anteriores, excepto la morcilla y las cubrimos con agua del grifo, echamos un chorrito de aceite y ponemos el puchero a fuego fuerte sin tapar hasta que comience a hervir. La morcilla no la echamos al puchero porque se rompería, así que la reservamos y la echamos al puchero unos 10 minutos antes de servir. Una vez que rompa a hervir bajamos el fuego y sin tapar dejamos unas 3 horas a fuego bajo, sin añadir sal ni remover las alubias. Únicamente menearemos de vez en cuando el puchero para que no se agarren y que el caldo vaya engordando.
Así después de varias horas escuchando plop plop tendremos listo el plato para servir.