El Karapaixo es una torta de pan muy especial que tradicionalmente las madrinas regalan a sus ahijados en época de cuaresma.
Lo que más llama la atención del Karaipaxo es su forma triangular y el hecho de llevar incrustados en cada extremo un huevo. Es típico de la comarca del Alto Deba – Debagoiena y tradicionalmente las madrinas se lo regalan en cuaresma hasta el día de su boda. Aunque en su origen, anterior a la romanización, era una ofrenda para festejar el inicio de la primavera.
En la actualidad el Karapaixo suele llevar en su interior un chorizo, e incluso se elaboran versiones dulces con huevos de chocolate en las pastelerías de la comarca.
Prepararla es muy sencillo. Tan solo se necesitan harina blanca, agua, levadura fresca, huevos, chorizo y sal. La receta del Karapaixo comienza con la elaboración de la masa. Primero, hay que añadir la harina, la levadura, el agua y la sal en un bol y mezclarlo todo bien. Posteriormente lo taparemos con film transparente y dejaremos reposar media hora. Por otro lado, ponemos a cocer un par de huevos.
Esparciremos un poco de harina por la mesa para que no se pegue la masa, pondremos la mezcla encima y la espolvorearemos con harina. Amasaremos unos minutos, incorporaremos la masa en un bol con un poco de harina, lo taparemos con film transparente y dejaremos que la masa fermente durante un par de horas a temperatura ambiente.
Es hora de poner papel de horno en una bandeja y de darle una forma ovalada a la masa. (Dejaremos un trozo de masa para decorar el pan). La pondremos sobre la bandeja y colocaremos los chorizos y los huevos. Con la masa restante crearemos tres cilindros, uno lo pondremos en el medio de los chorizos y los otros los usaremos para envolver los huevos. Cubrimos nuestra creación con un trapo y dejamos que fermente durante una hora. Horneamos el Karapaixo a 180 grados durante media hora aproximadamente.
Crónica Vasca, 17/03/24 – La ancestral mona de Pascua de Euskadi que anuncia la primavera