Las verduras rebozadas nos ofrecen un bocado crujiente por fuera que previene que la verdura quede reseca por dentro. Pero hay unas verduras más indicadas que otras para rebozar, y hay diferentes rebozados que se les pueden aplicar.
¿Por qué rebozar verduras para freír?
Al freír, los alimentos sueltan agua y ello, no sólo degrada la calidad del aceite, sino que también hace que el alimento frito quede reseco. Es por ello que aplicamos una cobertura que los selle y nos asegure el exterior crujiente y el interior jugoso de la fritura. Esta cobertura puede dividirse en tres categorías básicas: a base de harina (enharinado), a base de primero harina y luego huevo (rebozado) o a base de harina, huevo y al final pan rallado u otros cereales (empanado). En todo caso, hay que aplicar la cobertura justo antes de freír, para evitar que esta absorba el agua del alimento.
Las hortalizas carnosas (calabacín, berenjena, zanahoria, etc.) sin ideales para la freír rebozadas, así como las cebollas cortadas bien finas como aros de cebolla, alcachofas, etc.
Receta de tempura y verduras recomendadas
En el caso de las verduras, y procedente de la cocina tradicional japonesa, se suele emplear un tipo de rebozado conocido como tempura. La receta de tempura consiste en mezclar un vaso de agua con un huevo batido y unos 200 gramos de harina, formando una pasta homogénea que se deja reposar (ver aquí cómo hacer tempura, la técnica). Después se sumergen las verduras troceadas en dicha pasta y se fríen a alta temperatura. La idea, sin embargo, es que el rebozado forme una capa ligera sobre las verduras, dándoles un exterior crujiente, para lo cual es importante servirlas al momento.
Además de las verduras antes indicadas, resultan ideales para tempura los pimientos cortados en bastones.
Cocineando.com, 02/07/19 – Rebozados para verduras: trucos y consejos